Seguro que en algún momento has escuchado hablar, has leído o has visto en un documental de la televisión animales que pueden llegar a ser muy lentos para moverse, como los perezosos o las tortugas, y también animales que tienen un gran período de hibernación, como algunos polares. Pues imagínate un animal que aúne esas características y encima de todo, lo lleve casi al extremo. El resultado es un determinado caracol del que te vamos a hablar.
A todos nos apasiona el reino animal y aún más se conoce por la cantidad de curiosidades que nos ofrece es casi ilimitada. Hoy os traemos otro ejemplo de esos que hacen que te impresionen y, por qué no decirlo, puede que nos dé un poco de envidia.
Y no… ¡no se trata del caracol zombi! ¿No te suena?
¿Cuánto hiberna un caracol?
No hay un período estandarizado. Cada caracol hibernará según la temperatura que haya en la zona donde viva. En una zona más húmeda el tiempo que permanezca “en casa” será menor que aquel caracol que viva en un área más cálida. Será más probable encontrarse con ellos cuando la temperatura sea fresca y adecuada para los mismos, por ejemplo, en zonas de campo donde no llueve mucho puede que no sea muy frecuente encontrarse con ellos pero tras un día de lluvia, es muy probable que aprovechen para salir y aprovechar la temperatura más suave del exterior. Es por ello que el tiempo de hibernación de un caracol puede ser de un solo día si, por ejemplo, durante el día hace una temperatura relativamente alta y salir por la noche cuando refresca. Puede ser de incluso semanas en períodos de altas temperaturas. Pero puede llegar a ser de varios años. Estás leyendo bien porque en las zonas de desierto donde las temperaturas son elevadas durante todo el año, el caracol puede encerrarse en su caparazón y permanecer allí hasta tres años. Impresionante.
Tienen que mantener su humedad intacta
Como habéis visto al observar un caracol, su textura es siempre húmeda y es vital para ellos mantenerse así ya que si se secan están condenados a morir. Es este factor es que hace que en climas demasiados secos, como en los desiertos, tengan que hibernar tantísimo tiempo casi de forma obligatoria para su supervivencia. Lo más interesante es que eligen para pasar todo este tiempo bajo su concha un lugar por debajo de la superficie para que la temperatura pueda ser algo más baja y así la humedad sea más fácil de mantener.
Hay otros condicionantes que hacen que mantener la humedad sea relativamente más sencillo para los caracoles. Por ejemplo, suelen salir de sus caparazones por la noche cuando la temperatura es más fresca; al ser hermafroditas no tienen que preocuparse de andar buscando una pareja para su reproducción por lo que si tienen que estar mucho tiempo de su vida dentro de su “casa” pueden hacerlo sin temor de quedarse sin descendencia; y otro elemento importante es que una vez que se introducen dentro del caparazón, se crea una pequeña membrana en el orificio que queda en éste, esta lámina permite que la humedad interior se mantenga y quede aislado de las variaciones de temperatura del exterior.
Si un caracol puede estar hibernando tres años… ¿cuánto vive?
Es una gran pregunta ya que la vida de un caracol no es concreta pero se estima que puede llegar hasta los quince años de vida. Eso sí, una vida sin ningún tipo de estrés y mucho tiempo estando dentro de casa. Piensa en el citado caracol que se puede localizar en un desierto. Si llega a hibernar tres años una sola vez en su vida, ya ha estado durmiendo una quinta parte de su vida del tirón, y a todo este proceso de hibernación hay que añadirle el propio del día a día. Vamos que perfectamente puede alcanzar la mitad de su vida haciendo vida en su caparazón. No está nada mal ¡eh!
Ahora que conoces cómo se lo monta un caracol para soportar las temperaturas casi extremas donde vive y su estilo de vida, ¿te gustaría reencarnarte en un caracol? ¿O aún hay otro animal que conozcas que puede superar la calidad de vida de estos lentos animales? No dudes en compartir con nosotros todos tus conocimientos sobre este interesante tema.
